Se llama Ibis. Es un ave de piel negra cuya especie es hermana de la sagrada Threskiornis aethiopicus y su familia pertenece al orden pelecaniforme. Tiene el plumaje blanco pero el cuello, la cabeza y las patas van al descubierto. Parece un ave de otra era y otro mundo. Una que nunca había visto.
Sí, se llama Ibis y es un pájaro extraño e increíble que se pasea alegre por las calles de Sydney, Melbourne y Brisbane y que habita en casi toda la costa este Australia. Originaria de áreas rurales cálidas y acuáticas pero hoy también presente en áreas urbanas. Cuenta la leyenda, que es el último animal que se esconde cuando viene la tormenta y es el primero en salir cuando ya pasó. Es un ave que puede vivir solitaria o en manada. Es un pájaro observador y curioso. Uno que le gusta explorar.
Y así, durante los días que estuve en Australia el Ibis fue mi compañero de viaje y amigo. Era algo muy extraño pero me recordaba a alguien. Quizás el Ibis me recordaba a mi.